Recientemente hemos instalado un sistema de videovigilancia en una masía. Esta masía es de uso particular y actualmente está siendo usada como vivienda principal por varias personas.
MARIA ROSA FERRE ✿, CC BY-SA 2.0, via Wikimedia Commons
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Los inquilinos requerían de un sistema de videovigilancia que abarcara un perímetro cercano además de un recinto alejado. Es por ello que se ideó un completo sistema de cámaras y periféricos que solucionaran este problema.
En el exterior de la masía podemos encontrar un total de tres cámaras MOBOTIX. Dos de ellas son las MOBOTIX M25, que cuentan con un sensor óptico nocturno y la tercera se trata de la MOBOTIX M16 equipada con un sensor diurno y un sensor térmico.
Al usar un sensor térmico en un recinto exterior obtenemos una mejora en la detección de movimientos en áreas con poca visibilidad como se puede apreciar en la siguiente imagen:
Estas cámaras se conectan entre sí mediante switches hacia un NAS QNAP que guarda y registra los eventos detectados por las cámaras. La MOBOTIX M16 además se conecta mediante un MOBOTIX ExtIO a un altavoz que permite reproducir sonidos de alarmas, mensajes pregrabados e incluso hablar directamente a través de la aplicación de la cámara.
En el recinto que está alejado de la masía hubo que ser creativos ya que desde la edificación principal no se tenía visión directa y existía la preocupación de un posible sabotaje a cualquier sistema de vigilancia expuesto. Es por ello que se decidió por instalar una cámara oculta en una casita de pájaros situada en lo alto de un árbol y para eso la mejor opción es una cámara MOBOTIX S16.
